Presidenta Ejecutiva del ICE pone su mirada en la reinvención de la Institución

Irene Cañas Díaz ha sido Viceministra de Ambiente, Vicepresidenta de la Junta Directiva de la Refinadora Costarricense de Petróleo (RECOPE) y hoy marca un hito histórico al ser la primera mujer que ocupa la Presidencia Ejecutiva del Instituto Costarricense de Electricidad (ICE) en sus 69 años de vida institucional.

Cañas se define como una persona sumamente dinámica, activa, inquieta, y sin miedo al cambio o a los retos.  Por su mente el descanso permanece ausente, pero esto no es algo que se suscita a causa de sus múltiples responsabilidades en el ICE, sino que es un rasgo que tiene desde pequeña.

Estudió Ingeniería Civil en la Universidad de Costa Rica, siguiendo los pasos de su padre. “Recuerdo que papá tenía un horario muy variable. Tengo en mi mente la imagen de verlo llegar con las botas llenas de cemento mientras las sacudía en la entrada de la casa. Yo visitaba las construcciones y me encantaba ver el dinamismo de ese tipo de trabajo”, comentó.

Su llegada a la Institución se da en un momento en el que el país enfoca todos sus esfuerzos en la sostenibilidad y la integración de esfuerzos por generar los ingresos necesarios para llevar a cabo proyectos de gran importancia nacional. Sobre estos temas, conversó Cañas con Revista SOMOS CR.

¿Cómo se siente de ser la primera mujer en ocupar la Presidencia Ejecutiva del ICE en 69 años de historia?

En un primer momento, don Carlos Alvarado me llamó a una entrevista en la que me hizo varias preguntas, no solo a nivel de electricidad sino en varios temas relacionados a los cargos que había desempeñado previamente en la función pública. En ese momento, me dijo que me quería en su equipo de trabajo. A las pocas semanas me comunicó que consideraba que le podía ayudar mucho asumiendo las riendas del ICE.

Me siento muy honrada de que el Presidente haya confiado en mí para esta tarea. Para ser honesta, nunca le tuve miedo al hecho de asumir este cargo. Desde que me dijeron que estaba siendo considerada, empecé a pensar en muchas ideas y proyectos con el compromiso de llevarlos a cabo de la mejor manera.

Sé que hay muchas personas, en especial mujeres, que están a la expectativa de las puertas que se puedan abrir para demostrar una vez más que las mujeres tenemos toda la capacidad para asumir un reto de este tipo. Costa Rica ha realizado grandes esfuerzos para lograr la equidad de género tanto a nivel público como privado. Hoy, las mujeres estamos llegando a puestos de gran responsabilidad no por cumplir una estadística, sino por el reconocimiento a los méritos que estamos haciendo para desempeñar esas tareas. El país ha ido madurando en esta materia.

Previo a asumir este cargo, usted ya había trabajo por espacio de 17 años en la institución e incluso para la Agencia de Cooperación Alemana.

Mi primer trabajo en el ICE fue en ingeniería y construcción, específicamente en la parte de planificación estratégica de los proyectos que estaban prontos a construirse. Recuerdo haber revisado los costos del proyecto Angostura y los de un piloto de la Planta de Peñas Blancas. Un año después tuve la oportunidad de pasar al Departamento de Planificación Eléctrica, que es donde nacen los proyectos. En esta dependencia me tocó trabajar en proyectos que ya hoy están trabajando como el Proyecto Hidroeléctrico Pirrís.

Don Luis Ureña, mi jefe en aquel entonces, me dijo que necesitaba que no solo pensáramos en proyectos hidroeléctricos, sino que fuéramos pensando en otras fuentes de energía. Entonces comencé a trabajar en las diferentes fuentes potenciales de generación de energía con las que contaba el país. En ese momento me convencí, y aun lo estoy, de que la biomasa (residuos de materia orgánica de origen vegetal o animal) es una fuente de energía que incluso hoy la usamos muy poco. Algunos ingenios azucareros, empresas productoras de arroz, empresas que trabajan con palma, entre otras pocas, son las que usan la biomasa. Las empresas piñeras pronto empezarán a utilizarla también.

En países en los que hay invierno con nieve, almacenan la biomasa y generan electricidad durante el invierno. De esta forma, la biomasa se convierte en lo que llamamos una energía firme que está disponible los 365 días del año, como la geotermia.

Es normal que la biomasa pertenezca a un tercero, es por este motivo que comencé a trabajar en alianzas público-privadas. Poco a poco me fui involucrando con la Oficina de Cooperación Alemana en la gestión de fondos para desarrollar proyectos, al punto que me ofrecieron coordinar un proyecto en materia de energía renovable y eficiencia energética. Solicité un permiso sin goce de salario con la condición de aportar a la Institución desde el proyecto de cooperación.

¿Cómo encuentra al ICE al asumir el cargo?

Encuentro a una institución con mucha sed de innovar y por renovar el negocio. El Presidente me encargó la reinvención del ICE en términos de unificar proyectos que contemplen tanto el ámbito de electricidad como el de telecomunicaciones. Muchos de los proyectos del mundo actual fusionan las tareas realizadas en estas dos áreas, por ejemplo, las redes inteligentes y las ciudades inteligentes.

Este nuevo gobierno ha puesto su mirada en la protección ambiental, la descarbonización y temas relacionados. ¿Cuál es la misión que don Carlos le ha encomendado para desarrollar desde el ICE?

Son varias misiones. Primero que todo, me indicó que necesitaba un ICE que lidere el proceso de descarbonización de la economía, que vuelva a ser el Norte del desarrollo sostenible y que se fortalezca en este sentido.

El ICE ha marcado varios hitos en el proceso de desarrollo del país no solo en electricidad, sino también en telecomunicaciones. El deber ahora es ir de la mano con los avances tecnológicos apoyando el desarrollo sostenible de manera inclusiva en todo el territorio nacional. El Presidente quiere que el ICE trabaje de la mano con las demás instituciones para integrar un esfuerzo conjunto con miras al desarrollo nacional.

En estos casi tres meses, hemos trabajado muy de la mano con el Instituto Costarricense de Acueductos y Alcantarillados, con el Instituto Nacional de Ferrocarriles, Ministerio de Obras Públicas y Transportes, Ministerio de Seguridad, etc. Las ramificaciones que el ICE tiene es enorme, no es solo electricidad y telefonía.

REINVENCIÓN DEL ICE

¿Cuál es su visión de una flota de vehículos eléctricos en Costa Rica y el papel que juega el ICE en este tema?

Cuando analizamos la problemática que el país tiene en tema de emisiones de gases, vemos que una gran responsabilidad la tiene el sector transporte. El país tiene la responsabilidad de enfocarse en cómo reducir las emisiones en este sector haciendo una transformación de la flotilla vehicular a transporte eléctrico, esto en el entendido de que nuestra electricidad es casi 100% renovable, por lo que nuestra huella de carbono es mínima.

El tema de esta transformación está en la mesa desde hace varios años. El ICE fue pionero en la administración pasada con la adquisición de 100 vehículos eléctricos. Estos vehículos estarán circulando por las calles entre diciembre de este año y enero próximo. La idea es ir renovando la flotilla y que la sociedad los pueda ver.

Aunque hay una ley que exonera de varios impuestos a los vehículos eléctricos, nos ha costado que esté de manera operativa. En este momento hay vehículos en aduanas que no han podido desalmacenarse por situaciones entre Aduanas y el Ministerio de Obras Públicas y Transportes. Pero estoy segura que cuando este trámite sea mucho más sencillo, vamos a ver pronto una cantidad importante de vehículos eléctricos circulando por nuestras calles.

¿Cuál sería el papel que jugaría el ICE en la recarga de este tipo de vehículos?

En el seno de la Comisión Nacional de Conservación de Energía, que es una comisión liderada por el MINAE, se ha definido una estrategia a nivel nacional en la que todas las empresas distribuidoras tenemos cuota de responsabilidad en establecer centros de carga en las rutas más importantes del país. Ya hemos ido avanzando en la creación de lo que hemos llamado “Electrolineras”. El ICE ya ha instalado varios centros de carga y todavía tenemos el plan de instalar más estaciones en el resto del país.

En la administración anterior se habló de la incursión del ICE en obra pública. Esta nueva administración no estaría contemplando esta posibilidad y más bien su mira está puesta en otro tipo de reinvención institucional y de giro de negocio.

Los nuevos negocios están muy ligados al tema de ciudades inteligentes y redes inteligentes, por lo que estamos enfocados en los nuevos servicios que podemos ofrecerles a los clientes. Estamos trabajando en la instalación de medidores inteligentes para los clientes del ICE y de la Compañía Nacional de Fuerza y Luz (CNFL) para tener a la totalidad de clientes con medidor inteligente para el 2023. Esto nos va a permitir ofrecer otro tipo de servicios adicionales a nuestros clientes.

Estamos muy enfocados en negocios de convergencia, en los que juntamos telecomunicaciones y electricidad que nos abren un universo enorme para desenvolvernos. En definitiva, el enfoque ahora es cómo renovarnos en este tipo de negocios. Recientemente se aprobó la ley que nos otorga un préstamo del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) por $500 millones para la implementación de medidores inteligentes y  servicios inteligentes de la parte eléctrica, con condiciones muy favorables y que se pueden ejecutar en ocho años. Tenemos entonces, una buena cuota resuelta de este nuevo modelo de negocios. Estos medidores calcularían el consumo parcial y progresivo en una vivienda.

ENERGÍAS RENOVABLES

¿Cuál es el estado actual del uso de energías renovables?

Tenemos un promedio de 98,5% de energía generada de fuentes renovables. Este es un dato promedio. Las mediciones dependen de cómo se comporte el clima. Hay épocas en las que tenemos a favor el viento, el agua, el sol. Hemos tenido periodos dónde hemos generado electricidad de fuentes renovables al 100%. La energía que es más fiel es la geotérmica porque es estable, ya que no depende del viento o del agua, por lo que podemos generar electricidad las 24 horas del día, los siete días de la semana durante todo el año.

¿Cuál es el estado actual de las telecomunicaciones a nivel de la Institución?

El reto de competir en el área metropolitana es intenso porque es de día a día para conservar al cliente. Pero otro reto que es muy importante, y que es parte de la esencia del ICE por el principio de solidaridad, es la conectividad en todo el territorio del país y no solo en telefonía móvil, sino también de internet. Si queremos disminuir la brecha que distancia a las clases sociales, tenemos que trabajar con la conectividad para que las personas tengan la oportunidad de educarse y acceso a la información de forma igualitaria. Este es un reto que el ICE lo ha asumido muy seriamente con Fondo Nacional de Telecomunicaciones (Fonatel) y con la Superintendencia de Telecomunicaciones.

Hemos sido muy dinámicos y proactivos para que esta conectividad sea una realidad. Estas acciones son muy importante por los proyectos que Fonatel tiene que incluyen conectividad en parques públicos, hogares, etc. Este es un reto que en lo personal me llena mucho porque acortamos esas distancias que se han creado a nivel de oportunidades y le ganamos la partida a la pobreza.

¿Cómo define el trabajo que la institución viene realizando a nivel de innovación?

Esa innovación es integral en el sentido de que hoy por hoy, todos esos proyectos que se están creando toman en cuenta la necesidad del cliente, de la sociedad, de la empresa y buscan una solución de ganar-ganar para todos. Este es el reto de hoy.

Otro gran desafío, en aras de ser integral, es tomar en cuenta a todos los clientes. En este momento estamos en una transición de generaciones. Por una lado, tenemos a una generación no muy tecnológica y que ha vivido cambios importantes como el uso de computadoras, celulares, cajeros automáticos, etc. Por otro lado, tenemos a una generación que vive junto con la tecnología todo el tiempo. En este sentido, nuestro negocio tiene que ser lo suficientemente flexible y versátil para poder resolver las necesidades de todos nuestros clientes.

¿Cuáles van a ser, a futuro y puntualmente, las prioridades de su administración?

Tener una cultura más dinámica de innovación porque hoy la tecnología cambia muy rápido. Quisiera enfocarme en una cultura menos resistente a los cambios. Visualizo una institución mucho más transparente. Finalmente, mantener el enfoque en la búsqueda de soluciones innovadoras.

Al finalizar mi periodo, me encantaría dejar una institución líder en dinamismo. Quisiera que las nuevas generaciones vean al ICE como un pilar en el desarrollo sostenible del país, encaminado a soluciones innovadoras en materia de ciudades y redes inteligentes como un concepto altamente integral con el ICE como líder en este proyecto.

Para usted, ¿qué es el éxito?

Alcanzar las metas. El éxito se puede medir de manera personal o institucional. En todo caso, el éxito está en trabajar para llegar a las metas propuestas, levantándose las veces que haya que hacerlo.